CUANDO OCURRE...
Desde ese saludo que se lo toma
todo
como una canción que no se
conoce...
hay un suspiro que se arroja
a un precipicio que sólo tiene
límites
cuando se exhala el último aliento
antes de la pequeña muerte
Las bocas son buscadoras de tesoros
que tal vez nadie haya conseguido
en lugares que quizás sean
la meca de las cosechas de otros
tiempos
pero que se redescubren
se inventan otras canciones / otros
besos
con sabores a frutas insospechadas
y a voces que se fugan en do menor
Las manos –mariposas traviesas-
hacen vuelos y escapadas lisonjeras
-sobre un lienzo que es la piel-
listas a pintar el más rico cuadro
en un acierto de traviesos pinceles
por sobre el color del otro
que se entrega con los ojos
cerrados
a ser redefinido / reiniciado
Y nada qué decir cuando en cada
paso
en cada espiga / en cada brillo de
las gotas
hay un alma que se atreve a vivir
de nuevo
en ese viaje sin garantías ni
realidades
la más bella fantasía de tener
otra alma más en donde recalar
su nao que es... el más bello
artilugio
Francisco
Pinzón Bedoya
2018
