Los sentidos son...

  

 

LOS SENTIDOS SON…

 

Los sentidos son los reyes.  La exposición a estímulos mayúsculos llena el aire.  Se sienten premios no pedidos que elevan la sonrisa.  Tiempo de cosecha.  Alguna ley universal de compensaciones se debe estar ejecutando.  Cuánta falta hacía flotar en este mosto de sentires.  Uno que se orna con colores, texturas, olores, y un sinnúmero de estímulos que rompan la rutina para hacer del tiempo un aliado y nunca una carga.

 

Se confabula el sentir con el riesgo y a la vuelta están las trampas que uno decide si las obvia o las enfrenta.  En alguna noche, peligro grita la razón y un galope de sangre pide silencio más allá de todo lo racional que se pueda ser. ¿Sublimar el ser o dejarse llevar? Ese es el quid del tema central en noches de desvelo.

 

Francisco Pinzón Bedoya ©

Marzo 15 de 2018

 

Nota de EL DIARIO LITERARIO

Herramienta de trabajo del Grupo literario EL APRENDIZ DE BRUJO al cual pertenezco

 

 

 

Sin permiso

 

 

 

SIN PERMISO

 

La magia de mi palabra puede recorrer tu cuerpo

y adentrarse en tus lugares olvidados por otros

Sólo que yo... hundido en fantástico canto

ondeo mi bandera y paseo sin miramientos

por tu luna de acechos y emociones

porque mi voz busca el arrullo de tu beso

 

Francisco Pinzón Bedoya

2015

 

 

A (Tautograma)

 

 

 

“A”

 

Ando ansioso admirando árboles amarillos.

Apenas ayer aclaraba antes, ahora apesta.

Aquí, amigos amorosos abren alas anaranjadas

aunque aparezcan abiertas almas afligidas.

Ariscos alisios abaten amores así, apaleados,

antojosamente audaces, adictos al azul.

 

Francisco Pinzón Bedoya

2011

 

TAUTOGRAMA

 

 

 

He escogido

  

 

HE ESCOGIDO

 

Hoy he escogido llegarte

sin espantos ni ironías

con la frente misma

que aquella que me has visto

forzando entradas del viento

y cabeceando frente a tu sonrisa

He escogido estar cerca

de tu canto y tu silueta

de tu imposibilidad y tus heridas

con la palabra extrema

que dictan mis poemas

estirando por entre los verbos

la mano de los adjetivos

y el sabor de los sustantivos

... unos que jamás se cansan

                 de adorar tu alma

He escogido nacer de nuevo

como un niño que llega

al hogar que le dieron

los designios de los dioses

                 y así vivir en ti

como si nada de lo dicho

hubiera podido antes decirse

desde este amor nuevo tuyo

en que he nacido

He escogido amarte

                 ... eso he escogido

 

Francisco Pinzón Bedoya

2006

 

 

Te leo toda

 

 

 

TE LEO TODA

 

Leo de tus alas y tus vientos y me sabes a cometa

leo de tu boca y de tus besos y me sabes a ganas

leo de tu rojo y de tus manos y me sabes a humedad

leo tu libro y tus manos son versos de otros tiempos que me aman

y así...

sigo leyéndote en mi piel de miles de tiempos... tan llena de vida

que una vez más... agradezco a alguien mi regalo fabuloso

tal vez porque existes en algo que se deslíe y me acaricia

 

Francisco Pinzón Bedoya

2015

De mi libro SENTIRES EN MÍ MENOR
Página 150

 

 

 

No se vuelve al mismo lugar

  

 

NO SE VUELVE AL MISMO LUGAR

 

Voy por mi calle

la mía y la de nadie más

buscando marcas / referencias

validando añoranzas

despidiendo nostalgias escondidas

en los intersticios de una memoria

que ahora se agota

 

Me suena la canción que tarareo:

“Ya no vive nadie en ella...”

entre sólo dos ventanas que nadie tapió

sólo brotan recuerdos

y algunos sinsabores

 

No hay allí nadie igual

porque aquel igual no existe

ni existió / sólo vive dentro de nosotros

Aquellos árboles que nos daban sombra

fueron arrancados hasta el tocón

La fresca algarabía de la vida

rozando a otro en la calma

se fuga en el exabrupto del tráfico

 

No estoy sino en unas coordenadas

mi calle se fue / mi casa no existe

y por fin... mi corazón acepta

que la nostalgia debe emigrar

al rincón bueno de las vivencias

 

Francisco Pinzón Bedoya

2022

 

 

 

Fugacidad

  

 

FUGACIDAD

 

Tenía que mirar esas rayas

blancas y negras

Tenía que solazarme

con esa espléndida sonrisa

y en un de pronto…

volvió todo a quedar

como antes

Sólo que en mí…

ya faltaba algo

 

Francisco Pinzón Bedoya