miércoles, diciembre 28, 2022

No sé si haya...


  

 

NO SÉ SI HAYA...

 

No sé si haya exactamente

en la sombra de alguna tarde

una mano / unos ojos / unos brazos

que hagan desaparecer el abismo

y el talante estrábico

que dan estos sueños en noches azules

cuando a la ventana

arriban acuciosas y musicales

las gotas del último aguacero

 

No sé si en el canto babélico

en ese piar rítmico y travieso

haya unos para mí que traigan

la sonrisa que voy perdiendo

desde aquellos días en que trataba

de retratar con letras... un ángel

 

En esta ceremonia de máscaras

realmente... no lo sé

 

Francisco Pinzón Bedoya ©

2009

 

 



viernes, diciembre 02, 2022

Toda tú


  

 

 

TODA TÚ

 

Tu voz resuena dentro,

se curva como un siniestro,

llena todo como cuba de vino,

arisca como lejana cumbre de abril

 

Tus manos cual pájaros

aletean mi piel de recuerdos,

mis presencias de sueños y añoranzas

y se quedan pegadas de los vidrios

en los afueras fríos bajo algún aguacero

 

Tus pasos rápidos y finos

van delante de mí / en todos mis sueños,

y veo tu cintura cimbreante

y tus posaderas plenas de promesas

acometiendo la más feroz de las batallas

una noche y otra noche

en que fueron las horas atrevidas

los torvos testigos de dos vidas sin pausas

 

Tus ojos llenan mis espacios azules

y me auscultan para que aparezca,

y ya no es la miel sino fuego,

ése que se vierte en mis insomnias

y en esas delirantes frases que escribo

cuando tus ojos, no me miran

 

Pero es esa esencia indefinida,

aquella que rastrea mis suspiros,

la única que funge de festiva

en el castigo y en las juergas

que me doy –a solas-

cuando tu voz, tu piel, tus manos

y las miles de caricias

pasan canturreando por mi lado

porque ya tus ojos... ni me acogen

 

Francisco Pinzón Bedoya ©

2011

 

 




martes, noviembre 29, 2022

Cómo será...


  

 

CÓMO SERÁ...

 

“... y cuando yo me vaya

quedarán los pájaros cantando...”

Juan Ramón Jiménez

 

Cuando lleguen otros años

y su peso se sienta...

¿cómo sentiré todos estos

poemas en que vivo…

en que describo un yo desnudo

que –a veces- ni conozco?

¿cómo caracolearán los briosos corceles

con esos dolores íntimamente escondidos?

¿cómo hará trastadas el olvido

volcado sobre líneas que ni existen?

¿cómo permanecerán en la piel

los silencios y los cantos que se dieron

o habrá un bullanguero diablillo

creando fantasías tarde a tarde

desde esas alocuciones que me haré

y que tal vez nadie quiera escuchar?

¿cómo vendrán las noches y sus ensalmos

a redimir los transformados recuerdos

desde un poema que aún me guarde?

No lo sé y hasta quisiera

que algún persistente extravío

rondara mis manos de poeta

la mañana que destape

otras esencias de tiempos idos

aún en ese día en que ya nadie

           … quiera escucharme

 

Francisco Pinzón Bedoya ©

2011

 

 



lunes, noviembre 28, 2022

Sano


 


 

 

SANO

 

Me canto

y me dirijo

a un no sé qué lugar

a exhibir mis flancos

mis heridas

 

Levo mis anclas

y espero al viento

para que se lleve

mi noa de versos

 

Derivo y multiplico

mientras la ruinosa voz

se espanta dentro

en su concierto

Coros y decires

Presencias de aprendiz

Pasajes yermos y una luz...

 

Todo parece un espanto

y un suspiro

       en simultáneo

 

Sano / lentamente

     pero... sano

 

Francisco Pinzón Bedoya ©

2008

 

 


miércoles, noviembre 23, 2022

Plurales


 

 

 

 

PLURALES

 

“tus bocas que saben / a tus humanas pasiones”

Karin Bellman

 

Tus bocas que se abren a la par

se tragan mi mundo en asaltos,

tienen el hambre mansa de un torbellino

porque desbrozan con tu extraña presencia

aun cuando hayas desaparecido allá en el tiempo,

en la distancia ajena en que te encuentras.

 

Tus manos, aves migratorias,

han pasado volando palmos de mí,

noche a noche, gimoteando,

como queriendo estacionarse cerca...

a la fuga intensa, a la desazón angustiosa

(pero no pueden / no estás ni te acercas)

 

Tus ojos, furia de mar, angostos pasajes,

por donde se debate la historia cantarina,

desde mi paso averso al cosmos / sin ropajes,

tienen la displicencia y el abrazo simultáneos,

están llenos del esplendor que se congeló en las fotos,

paseando conmigo, cada día, como si pudieras.

 

Tus letras, tan escasas, dicientes y tibias,

se unieron al canto de las aves, del silencio,

al piano y la zampoña, al grito y el susurro,

para llegarme noche a tarde, mañanas enteras,

como si al leerlas fueras tú quien las dijera...

 

Tus espesas formas de atraparme

seguirán vivas mientras viva esté mi alma,

así como han figurado los soles y los tiempos,

las eras y los aguaceros, los talantes y los recuerdos,

de todo lo que tenías en tu exceso,

para abarcar con ese vaho cálido

todo lo que te di... sin tú saberlo.

 

En fin... (y en principio...)

estás hecha de los máximos plurales,

rastros de entresueños, de duermevelas,

de noches escribiendo a la luz de una lámpara,

con incendios en ti... que no te queman,

sólo traen el calor de inéditos recuerdos

y también... de los más implacables

que aún siento... que aún preservo.

 

Francisco Pinzón Bedoya ©

2010

 

 


jueves, noviembre 17, 2022

Toda tú


 

 

 

TODA TÚ

 

Tu voz resuena dentro,

se curva como un siniestro,

llena todo como cuba de vino,

arisca como lejana cumbre de abril

 

Tus manos cual pájaros

aletean mi piel de recuerdos,

mis presencias de sueños y añoranzas

y se quedan pegadas de los vidrios

en los afueras fríos bajo algún aguacero

 

Tus pasos rápidos y finos

van delante de mí / en todos mis sueños,

y veo tu cintura cimbreante

y tus posaderas plenas de promesas

acometiendo la más feroz de las batallas

una noche y otra noche

en que fueron las horas atrevidas

los torvos testigos de dos vidas sin pausas

 

Tus ojos llenan mis espacios azules

y me auscultan para que aparezca,

y ya no es la miel sino fuego,

ése que se vierte en mis insomnias

y en esas delirantes frases que escribo

cuando tus ojos, no me miran

 

Pero es esa esencia indefinida,

aquella que rastrea mis suspiros,

la única que funge de festiva

en el castigo y en las juergas

que me doy –a solas-

cuando tu voz, tu piel, tus manos

y las miles de caricias

pasan canturreando por mi lado

porque ya tus ojos... ni me acogen

 

Francisco Pinzón Bedoya

2011

Versión 2022

 

 

 



domingo, noviembre 13, 2022

Mi imposible


 

 

MI IMPOSIBLE

 

No quiero saber por qué

no puedo alargar el tiempo

habitar por siempre ese espacio

en que leyéndote mis sueños

mis suspiros mis afectos mis secretos

                     te elevas... te tengo

 

Francisco Pinzón Bedoya ©

2002

 

  




viernes, octubre 28, 2022

Febrero de 1978, 7 pm

  

 

FEBRERO DE 1978, 7 PM

 

Explotó el frente.  Una lluvia de esquirlas de múltiples tamaños casi cúbicos del parabrisas de seguridad ingresó hacia los ocupantes.  El impacto de aquel camión de estacas contra el bus, que acababa de dejar sus semovientes en alguna parte cercana, sonó como una bomba.  Fue instantáneo.  Aún recuerda aquel tintineo, el mazazo inclemente de muerte y el miedo que lo invadió paralizando todo su cuerpo.  Nos matamos.  Ese hp..., fue lo último que oyó mientras flotaban en vuelta de campana desde la losa del angosto puente hacia el fondo arenoso de la quebrada seca.  El dolor lacerante en el pecho hendido que se irrigaba por cada una de sus costillas despertó su conciencia intermitente.  Se oían quejidos y llantos, y luego con curiosidad registraba un silencio como de una oscuridad ominosa regándose por todo el pasillo del bus que ahora era un techo alfombrado.  El siguiente despertar estaba lleno de lucecitas y voces lejanas.  Su último pensamiento antes de volverse a desmayar fue: ¡Así ha de ser el infierno!

 

FRANCISCO PINZÓN BEDOYA

26/X/2022

 

 

Imagen tomada de

The sound of breaking glass.

By Matti Merilaid.

 



lunes, octubre 24, 2022

A mis padres


  

 

MIS PADRES

 

Donde quiera que tengas tus muertos tienes tu alma. 

Allí quedas anclado al terruño y a su naturaleza, a su horizonte, en mi caso, a su mar.

Allí ellos han aprendido las voces del mar y los guiños de las constelaciones, los giros insondables de los remolinos entre las piedras del pequeño cabo que ni figura en la geografía.

Han descifrado la música del viento que baja de los cerros por entre salientes afiladas, con sus siseos de arena.

Han conversado con los gorjeos de las aves marinas y con los rugidos de las olas al romper en las noches de tempestad.

Han aprendido a bailar de los movimientos sinuosos de los árboles en los finales de tardes caliginosas.

Han visto cómo se desmayan la mayoría de las plantas, porque el calor es tanto que hace de cada piedra un horno y casi las convierte en reflectores que alumbran y ciegan a quienes se atreven a mirar.

En el inmediato fondo donde las corrientes crean turbulencia, han desentrañado el misterio de los corales y los cangrejos, y los han hecho parte de hábitat móvil.

Allí moran en una eternidad que se ha acoplado a tantos ritmos cambiantes que se funden con el paso isócrono e indetenible del tiempo para ser una parte de natura.

Allí los concibo, en ese ambiente están, cazando atardeceres de ocres inimaginados y elevándose a la categoría de inmortales.

 

Francisco Pinzón Bedoya

20/X/2022

 

 





lunes, octubre 17, 2022

Retrohistoria


 

 

RETROHISTORIA

 

Parto del después de y me devuelvo

a regodearme en pecados indiscretos

 

La dicha trae suspiros y jadeos

y envuelve el aire y lo revela en orgasmos

 

Las pupilas dilatadas / la piel hirsuta

se gestan entre lamentos y olvidos

 

Las manos crispadas que acarician

cada parte en tonos de re mayor

 

Invencibles pasajes de fantasía

tiene sus relieves en medio del tráfago

 

Recorridos soñados hechos realidad

pero con el deslumbramiento distinto del ahora

 

Conjunción de humedades de varias vertientes

se juntan en un croar de ranas de vendimia

 

Un tobogán que lanza cuerpos al vacío

sin miramiento de la altura imperfecta

 

Se crea un artificio blando desde el desnudarme

para encontrar al otro / a la misma / al sueño

 

Van rondando los supuestos entre el llegar y el darse

en donde ya no hay reversa / no hay un detente

 

Un atreverse deja en claro que no lo es

que hay la consigna de sentirse y brindarse

 

Somos sólo sonrisas de cuando se tienen fantasías

más allá de las posibilidades de fiesta

 

La saludo y me sonríe / le sonrío / me llama

sin palabras y es la unión del aire de dos

 

La añoranza de hallar un ser que esté allí

cubre la ansiedad y delata las manos sudorosas

 

La vi en su armadura y no me detalla

tal vez ya sabe que la busco y ni lo nota

 

Pasa como una exhalación en su pelo festivo

y no me doy cuenta de que es exprofeso

 

¡Hola! ¿Cómo estás? Bien y tú

Ya es un comienzo...

 

Francisco Pinzón Bedoya ©

 

 

  




Trasiego (Nonatos)

      TRASIEGO (NONATOS)   Pasan sin dueño los deseos en un tiempo en que la desnudez se refleja mansa en el espejo de la noche que empieza ...