"¿Eras un presagio?"
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CUANDO IBAS A MI LADO
Eras así de simple
Verte sentada de blanco
en tu indecible lenguaje
con no sé qué tipo de risa
como un acuario que me cantaba
y yo luchando por tocarte
y por no tocarte
por escapar de mis deseos
Eras así de posible
estabas evidente y reclinada
sobre tu propio cansancio
y esa tarde... a pesar de la ternura
con que tu voz me llamaba
tus deseos de agradarme
no se manifestaban
Eras así de cercana
pero tu pelo... no te soltabas
Ese símbolo de los dos
ese azabache de mis noches de fiebre
de mis olvidos volcánicos
de tardes de invierno en mi memoria
Ese batir de alas nocturnas
con esos destellos en que envuelves
los antiguos tonos del rimarte
Estabas y no estabas a mi alcance
y eras sólo mi presagio
Nada de tu susto extraño
ni de tu mirada incierta
dejaba prever que me tomabas
Nada pertenecía a mi reino...
a ese reino de mis utópicos sueños
Eras casi real... casi real
y sin darme cuenta arribamos
un jueves víspera de tu clase
sin más tiempo ya a mi lado...
sonreíste... te alejaste caminando
acompasada / asimétrica
y con ese adiós que no cesa
... ya no estabas
Hasta allí ibas conmigo
tenía yo mis ojos en tu alma
y eras cercana...
y eras alcanzable...
y eras casi real...
pero te fuiste...
y yo he vuelto vacío
otra vez a sentirme mortal
Francisco Pinzón Bedoya ®
"¿Eras casi irreal?"
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