Soy de voces

Hay días en que a uno le da por definir
por destazar pasado y atrapar futuros
Hay días en que a uno se le ocurre cambiar rumbos
y desandar caminos que a ninguna parte conducen
y en esos días... como hace menos de una semana
a uno se le ocurren poemas... como éste:

SOY DE VOCES

Soy un ser oral que no habla
que apenas balbucea
y enfrenta sus demonios
con feroces combates imaginarios
Soy un conversador enjaulado
Soy un buscador de escuchas
que no hallo / que no tengo
Intento conciertos pasivos
en lecturas que invento
al encuentro de esos libros
que se alejan o acercan de mis manos
de la forma en que yo tiempo les dedico
¡Poco! ¡Preciosamente ajeno!
¡Obtusamente lejos!

Soy un ser oralmente lejano
de esos escuchas que no me están esperando
Los recorridos cuánticos
por ese reino de la imaginación
tienen verbos / sustantivos
y un tropel de adjetivos
y entonaciones... que aún no he dicho

Soy un conversador que lleva en sí mismo
el ruido de un mundo en el que habito
donde salpican sin orden
todas mis voces internas
todos los cantos que a veces alegran
la voz que ya no canta
y la esperanza que se pega
hirviente a mis manos agoreras

Soy un decidor de entelequias
que nadie oye pero que yo lanzo al aire
A ese mismo aire donde medran
la sinrazón y la muerte
los espantos y los ritmos
las pasiones y los sueños
y donde quiero que escuche
... esa piel / que no llega

Y después de ese grito, de esa voz interna que sale y se estalla en el aire...
hay un sensación idefinible... como el poema mismo...
y uno encuentra que el poema es uno y que uno... está en el poema
dicho, revuelto, en amasijo, con coraje, con lágrimas no dichas,
con acentos maltrechos, con un fusionar de estrellas enlazadas por algunas metáforas
que ya no sé si son mías o las he amado desde el verso de otro
o desde cantos de sirenas que corren por la sangre y que cantan... por uno, por mí, por definir lo que soy hoy.

Saludos a todos y una excelente semana...

Para ustedes, hoy no guardo mis mejores versos para un fólder que nadie mira más que yo sino que -como este poema- pongo al aire mi sueño repetido, mi entelequia, mi sinrazón... mi brillo de ojos que están... más allá de mí.



HECHEIYHMADU