VERDE
La tarde quieta aúpa al silencio
Nubes de humedad pasan y me miran
Yo, sólo rescato mi arborescencia
en la mitad del suelo de mis raíces
Mis cantores vienen a cobijarse
Yo, les brindo mi follaje, mis
ramas
Ya el sol me ha colmado de energía
y en mis venas viaja la vida en su
furor
He visto pasar mil rostros de
hombres
y viajar a lugares impensados
Lo que nadie sabe es que en
nosotros
el tiempo es uno solo y somos
un universo vegetal que muere
... lentamente
Francisco Pinzón Bedoya
2022
Si uno de esos hombres que ha pasado por algún árbol y sentido su magia. Se ha detenido, observado y abrazado a su tronco. Bastará para que nunca más en la vida lo olvide.
ResponderBorrarUn gran abrazo Francisco. Ha sido maravilloso descubrir su poética.
Gracias, Tatiana. Un abrazo. Bienvenida.
BorrarReflexiones sopesadas al abrigo de un buen poema.
ResponderBorrarUn abrazo.
Gracias, Tocayo. Es un desdoblamiento "natural". Abrazos.
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